-LIBERTAD DE EXPRESION-

"Toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento y de expresión. Este derecho comprende la libertad de buscar, recibir y difundir informaciones e ideas de toda índole, sin consideraciones de fronteras, ya sea oralmente, por escrito o en forma impresa o artística, o por cualquier otro procedimiento de su elección y gusto."

"No he venido a traer paz, sino espada" San Mateo. X,34


lunes, 23 de julio de 2012

"DESPEDIDA Y CIERRE" por Jorge Mota

INTERESANTÍSMO DOCUMENTO PARA LA REFLEXIÓN... Despedida y Cierre Por Jorge Mota. "...el actual nacionalsocialismo no tiene nada que ver, ni de manera lejana, con el del III Reich" Por Jorge Mota : Inició su vida política a los 15 años, en 1962. Su objetivo fue la organización de una entidad que con carácter europeista, representara y se hiciera portavoz del sentir de la juventud española. A los diecinueve años, tras varios fallidos intentos, y en unión con otras personas, creó CEDADE, "Círculo español de amigos de Europa", permaneciendo como Jefe de la Sección Juvenil hasta el cambio de junta de 1970, en que es nombrado presidente, al frente de un nuevo equipo de una media de edad de 26 años, frente a los 45 de la junta saliente. A partir de entonces, la actividad de CEDADE creció, traspasando las fronteras de España, y transformándose en el principal referente de post guerra del Nacionalsocialismo de habla castellana. En esa época Jorge Mota no poseía títulos ni cargos de importancia, trabajando en obras manuales y administrativas en diversas empresas, dedicando especial atención al conocimiento del problema obrero. Su verdadera vocación, aparte de la política, es el Arte, por el cual siente gran afición: música, poesía y artes plásticas son sus disciplinas favoritas. Partidario de la formación integral del individuo, Mota da al deporte gran importancia, habiendo practicado judo, esgrima, tiro, montañismo y ciclismo. Posteriomente a la disolución de CEDADE, colaboró esporádicamente en publicaciones españolas y extranjeras sobre temas artísticos y políticos (N.d.E.: Reescrito de "Hacia un Socialismo Europeo"). Ramón Bau tuvo la amabilidad de organizar mi última conferencia política en la cual ya manifesté que, aunque circunstancias especiales podían determinarme a pronunciar alguna otra, las posibilidades eran muy escasas y así podía considerarse con bastante probabilidad que ésa era mi última conferencia política. Han pasado unos pocos años y ahora de nuevo Ramón Bau me brinda la posibilidad de publicar mi último artículo político y, de la misma manera que ya dije en mi conferencia, dejo abierto, más que una puerta, un simple ventanuco, y podría volver a escribir de temas políticos si las cosas cambiasen mucho, mucho. La verdad, no lo creo. Hace algún tiempo determiné que escribiría artículos para cualquier revista o publicación que me lo solicitase, lo mismo fuese el "New York Times" o "Bajo la Tiranía", pero se ha dado el caso de que los grandes rotativos no han mostrado el más mínimo interés en mis colaboraciones literarias y sí en cambio las revistas a base de fotocopias y de tirajes cortos y más cortos todavía. En "Bajo la Tiranía" he leído trabajos estimables y otros de dudoso gusto, -más de los primeros que de los segundos-, pero ha llegado un momento en mi vida en que me he vuelto más exigente y me produce cierto malestar que mis modestas colaboraciones, más llenas de idealismo que de talento literario, vayan en compañía de determinados trabajos cuya lectura me solivianta. Y ahí tenemos el caso del titulado "Holocausto 11" y que apareció en la revista Nº 37, en la cual yo escribí unas palabras sobre la Navídad, con un propósito fraternal y conciliador. En el aludido artículo "Holocausto 11" se indica que está sacado de la publicación Boletín de Noticias NS del NSDAP-AO, lo cual quiere acreditarlo como una publicación representativa del nacionalsocialismo, pero evidentemente en la revista "Der Auslanddeutsche", que vendría a ser la equivalente de la que se edita actualmente, publicada en el III Reich, no hubiesen permitido nunca un artículo de esta naturaleza. Los NS actuales, sean AO o NO, no tienen ninguna relación, ni la más ligera y lejana con el nacionalsocialismo histórico. Los actuales NS AO o NO, se limitan, una y otra vez a temas raciales, judíos, conspiraciones y mandangas, pero de arte, naturaleza, religión, cultura, socialismo... nada de nada. Adolf Hitler disponía de enormes cantidades acumuladas de neurogases que podría haber usado como "traca final" llevándose por delante unos cuantos millones de europeos de todos los países en liza, pero prefirió la derrota y la muerte que convertirse en un ángel -más bien diablo- exterminador. La única ocasión en que los gases convencionales fueron utilizados por los rusos en el frente del Este, se apresuraron a comunicar los soviéticos al Alto Mando Alemán que se había tratado de un error. Los kamikazes japoneses se lanzaban contra buques de guerra poderosamente armados y lo mismo podrían hacer los actuales pilotos suicidas islámicos y probablemente con muchas opciones de éxito a juzgar por el enfrentamiento de los pilotos argentinos frente a sofisticados buques ingleses en la guerra de las Malvinas. Sin apenas ninguna duda un ataque suicida sorpresa, contra un portaviones en vez de contra edificios civiles, habría tenido las mismas posibilidades de éxito y podría haber sido encuadrado como una acción bélica. Evidentemente los kamikazes japoneses habrían logrado más víctimas -con menos probabilidades de ser derribados- si en vez de atacar acorazados se hubiesen lanzado contra una catedral durante la misa de 12, pero curiosamente no lo hicieron. Es la diferencia entre un héroe y un criminal. El jefe de los kamikazes se estrelló contra una montaña una vez concluida la guerra para que nadie pensase que su vida valía más que las de los hombres que enviaba a la muerte. No se puede hablar del 11 de septiembre con esa indiferencia y ese lenguaje barriobajero de racista de película de serie B. Ya está bien de conspiración judía. Ya está bien de demagogia barata. El mundo está lleno de individuos impresentables altos, rubios y con ojos azules y por más que busquemos no encontraremos detrás ningún judío oculto. Son ellos suficientemente despreciables para hacer todo tipo de acciones inmorales sin ayuda de nadie. ¿A quién hemos de preferir? ¿A un inmigrante honrado que trabaja y tiene su familia a la que educa en sus tradiciones o a un individuo alto, rubio con ojos azules, varias veces divorciado, director de una multinacional bancaria, accionista principal de un consorcio internacional de fabricantes de armas químicas que tiene la casa llena de electrodomésticos y sus cuentas bancarias llenas de dinero sucio? Cualquier persona normal pensaría que es éste es un planteamiento demagógico pues induce claramente a hacer una elección, pero esa persona normal no sabe que hay personas, no tan normales, que eligirían al blanco porque es blanco y creo que entre los lectores de "Bajo la Tiranía" habrá algunos de esos, aunque espero que no muchos. No es la raza blanca, sino la Cultura Occidental lo que nos confiere la coherencia. Pero al margen de unas u otras opiniones al respecto lo fundamental es dejar claro que el actual nacionalsocialismo no tiene nada que ver, ni de manera lejana, con el del III Reich y ello lo voy a demostrar rápidamente. Pido a los lectores de "Bajo la Tiranía" que citen los nombres -sin necesidad de ir a localizarlos en libros o diccionarios- de cinco escultores, cinco arquitectos, cinco pintores, cinco músicos, cantantes, actores de cine, películas no políticas, poetas, escenógrafos, directores de orquesta, personajes vinculados al mundo del trabajo, mujeres vinculadas al nacionalsocialismo, deportistas... etc., etc. del III Reich. Hitler sabía las respuestas, el Dr. Göbbels igualmente y yo también, sin necesidad, se entiende, de ir a buscarlas, ni siquiera de meditar, pero dudo mucho que entre los lectores de "Bajo la Tiranía" haya uno solo capaz de contestar esa pregunta. Y evidentemente entre los lectores del Boletín del NSDAP~AO, puedo asegurar que ni uno (1). Y esos señores, que así por las buenas y sin sentir la más mínima vergüenza, se erigen en representantes del nacionalsocialismo, son los responsables de que todos esos nombres a los que se referían las preguntas permanezcan desconocidos, pues para los enemigos del nacionalsocialismo sí eran nacionalsocialistas, pero para los actuales NS no lo son pues ni saben que existen. Parece que en la actualidad una persona es nacionalsocialista cuando ella misma dice que lo es. Cualquier revista pone una cruz gamada en su portada e inmediatamente se la considera nacionalsocialista y todos los grupúsculos NS del mundo la anuncian, la promocionan, la comentan e incluso se suscriben a ella. Creo poder afirmar que yo fui la primera persona en España que se declaró nacionalsocialista. El motivo de mi sugestión hacia dicha ideología política provenía de la lectura de diversos textos propagandísticos editados en el III Reich. Los que más que sugestionaron fueron cuatro folletos titulados "El Campesino en la Gran Alemania", "La Belleza del Trabajo en Alemania", "El Servicio del Trabajo de las Muchachas Alemanas" y "La labor del partido en pro de los alemanes". Posteriormente conocí otros textos, pero fueron fundamentalmente esos cuatro los que me convencieron de mi ideología nacionalsocialista, lo cual acabé de comprobar a través de la lectura de las revistas de propaganda alemana editadas en español, especialmente "Signal" y "Aspa", tratándose en ellas todo tipo de temas pero donde era verdaderamente raro encontrar algo sobre judíos o raza o SS que ahora parece ser lo único que preocupa a los que se proclaman nacionalsocialistas hoy. Fundamentalmente la propaganda del III Reich se basaba en el socialismo, el NSDAP era un movimiento fundamentalmente socialista -sobre lo que ya insistí en un artículo publicado en estas mismas páginas-, y cuyo principal objetivo era crear una comunidad popular lo cual logró evidentemente, pero ahora el tema parece haber desaparecido de la propaganda de los que se autoproclaman nacionalsocialistas en la actualidad. Pero incluso aunque se editase un volumen de 10.000 páginas sobre ello, aunque se dediquen algunos artículos al tema, lo preocupante es que a los actuales nacionalsocialistas, -que lo son en base a lo que la propaganda contraria quiere que sean-, no les interesa el tema. Y así las empresas de trabajo temporal, la explotación a la que son sometidos muchos inmigrantes, la progresiva destrucción de la legislación social europea lograda después de muchos años de lucha, facilitando el despido, creando inseguridad laboral, reduciendo el seguro de desempleo, aumentando las cuotas pero reduciendo los servicios etc., etc. todo eso pasa absolutamente desapercibido en la propaganda nacionalsocialista actual que parece exclusivamente preocupada en hablar de lo que figura en los titulares de los periódicos, aunque eso sí, para decir lo contrario por simple antagonismo. En general los "nazis" actuales manifestarán casi siempre actitudes contrarias a lo que les parece que defiende el Sistema, pero cuando la prensa internacional dice: “Los nazis son únicamente antijudíos", los nazis de todo el mundo se apresuran a ser exclusivamente antijudíos, cuando dice “son racistas patateros”, los nazis corren a ser racistas patateros. La prensa puede hacer pensar a los actuales nazis lo que le de la gana y si en grandes titulares, películas, programas de televisión, etc. se dice que los nazis eran socialistas, pasado mañana todos los nazis serán socialistas convencidos. Solo hay una excepción. La prensa dice que los nazis son violentos y la verdad es que no es así excepto en contadísimas ocasiones, aunque estoy tentado a creer que ello es debido más a cobardía que a convicción, pues violentos de boquilla, que celebran muertes y atentados, sí creo que debe haber. Como decía Gracián, -aplicándolo a los nazis actuales-, son tontos todos los que lo parecen y la mitad de los que no lo parecen. Aunque esa otra mitad, o quizás la mitad de esa mitad, lucha con idealismo, espiritualidad, sacrificio y entrega para intentar que las cosas sean de otra manera. No quiero con esto pretender que no existe un "problema judío". Yo me sugestioné por el nacionalsocialismo debido a su política socialista, pero luego también conocí y estudié el problema judío. Leyendo "La Francia Judía", uno tiene la sensación de una conspiración judía en la que todos los miembros de la misma eran judíos, (aunque no todos los judíos fuesen miembros de la misma.) En la época del III Reich me dio la sensación de que ya no era lo mismo. Había, eso sí, una preponderancia de judíos en la prensa, bolsa y determinados sectores pero ya no me parecía que "todos" lo eran. Había muchos "arios puros" que también participaban del negocio. Actualmente me parece que los judíos son minoría y que los “arios puros" son los que dirigen y organizan mayoritariamente esa campaña de decadencia cultural y así, si bien a principios del siglo XX el arte decadente se hallaba bastante dominado por judíos, en la actualidad únicamente aparece uno por aquí otro por allí, pero en cambio, hay multitud de "arios" despreciables que son los más representativos. Podríamos parodiar a Calderón diciendo: "Por la concomitancia estoy tan diestro, que puedo dar lección a mi maestro". Por otro lado encontramos entre los judíos notables personalidades, algunas de ellas de gran entidad como son los casos de mi director de cine preferido Max Ophuls o del escritor de cuentos Felix Salten (autor de Bambi entre otros) las obras de los cuales son de gran calidad. Tenemos multitud de judíos en el mundo de la música unos simpáticos y otros antipáticos, pero todos ellos responsables en gran medida de la difusión de la cultura occidental (ahí tenemos a Mahler o Mendelssohn, entre los compositores o a Solti, Bruno Walter, Baremboim, Herman Levi, etc. entre los directores, incluido Levine que me cae bastante mal pero que hace las cosas bastante bien... Tenemos también varios escritores revisionistas de origen judío, quizás únicamente media docena pero en cambio no conozco ni un nacionalsocialista que se haya preocupado de defender a los judíos o a una parte de ellos, de la campaña antijudía clásica de los nacionalsocialistas de post-guerra o incluso de la de la época del III Reich que como la película "El Judío Eterno" es auténtica bazofia. No resulta coherente limitarse a estar a favor de los que están en contra de los judíos. En el tema Israel/Palestinos evidentemente la razón está -o estaba- de parte de los palestinos. La solución ideal a la indudable necesidad de un hogar para los judíos hubiese sido la solución Madagascar propuesta por el III Reich, pero ahora ya no puede volverse atrás la historia cuando miles de personas han nacido en Israel y no son otra cosa que israelíes. Cuando se creó el Estado de Israel los judíos hacía dos mil años que no vivían en él, ahora sin embargo llevan ya medio siglo, hay que buscar otras soluciones, pero desde luego dedicarse a enviar suicidas a los supermercados no es la mejor manera de acreditarse como los que tienen la razón. Yo conocí al hijo del Gran Muftí de Jerusalén y era una persona muy afable y sencilla que no creo que hubiese aprobado esta forma de luchar matando indiscriminadamente. No todos los palestinos aprueban esa forma de lucha como no todos los judíos aprueban las represalias vengativas, pero lamentablemente las bombas tienen más eco en la prensa que las palabras. Yo puedo entender el caso de una persona que desesperada cometa cualquier locura, pero cuando se trata de algo organizado no hay otra forma de verlo que como una monstruosidad. Hay algunas personas que ven con simpatía que un suicida cause la muerte de 10 personas en un autobús israelí como los hay para los que la destrucción de las torres gemelas les parece una acción bélica de primer orden y digna de aplauso, y sin embargo ahí murieron miles de personas de todas las ideologías, nacionalidades, razas y creencias. ¿Puede eso tener justificación? Si la justificación se halla en que Estados Unidos apoya a Israel, dado que España apoya a Estados Unidos deberíamos aceptar como muy natural que los integristas árabes lanzasen una consigna diciendo: "mate un español" y pidiesen a todos los árabes que hay en España se matasen a ancianitas que salen de misa, a niños que van al colegio, o a excursionistas solitarios, etc., etc. Con esto no necesitarían ni suicidas y podrían matar un montón de gente inocente cada día. ¿Estarían de acuerdo los lectores de "Bajo la Tiranía" con algo así? Probablemente ni uno y eso se explica por aquel refrán catalán/castellano que dice: "De tuyas a mías cuantas m'en fotaries". "Que maten a quince mil americanos está muy bien, que maten a mi vecino de arriba está muy mal, y que me maten a mí simplemente porque soy español y mi gobierno apoya a los Estados Unidos, eso es horrendo". ¿No deberíamos juzgar las cosas desde la óptica de la moral y no dejarnos llevan por un odio absurdo y propio de gente marginal? Sería comprensible que alguien defendiese a Bin Laden por considerarlo inocente, pero por desgracia todos los textos u opiniones que he escuchado a favor de Bin Laden lo apoyan por considerarlo el responsable de los ataques suicidas y no por haber sido erigido como posible "cabeza de turco" del tema. Hoy día -debo repetirlo- el nacionalsocialismo no tiene nada que ver con el del III Reich y la única manera de clarificar muestras ideas es leer la propaganda editada en el III Reich, especialmente la que se editó en español y formarnos nuestra propia idea. Los libros editados por camaradas con posterioridad a la II Guerra Mundial deben ser tomados con ciertas reservas pues he detectado numerosos casos de manipulación, como suprimir una nota que favorecería al cristianismo en el libro de Darré, suprimir cuatro páginas de la edición "completa" de "Mi Lucha" donde se atacaba al paganismo, inventarse la mitad del discurso de Göbbels del 19 de abril de 1945 para incluir una serie de "profecías" que nunca mencionó, inventarse una sensacional noticia en el "New York Times" sobre tema revisionista que resultó ser falsa, etc., etc. Si leemos la revista "Aspa" [N.d.E.: nada que ver con el sitio web chileno de nombre similar] o "Signal", ahí tenemos el pensamiento nacionalsocialista. Yo puedo afirmar que estoy de acuerdo con el 90 por ciento de lo que se publicaba en dichas revistas y que en cambio estoy en desacuerdo en el 90 por ciento de lo que se publica en las revistas NS actuales, en las cuales junto a los temas estrellas judíos, razas, SS, también están los ataques al cristianismo y la defensa del paganismo que tampoco podemos encontrar por ninguna parte en la propaganda del III Reich en español. Yo me sugestioné por el nacionalsocialismo debido a su política socialista que me pareció absolutamente innovadora, y para que los lectores de "Bajo La Tiranía" puedan tener una ligera idea, voy a resumir algunos de los aspectos que me sugestionaron, todos ellos sacado de textos del III Reich en español. Repito: no son ideas mías en absoluto. 1.-La propaganda socialista alemana enaltecía al obrero, pero no pretendía destacar a aquel trabajador que había llegado a millonario, tal como siempre se presenta en el ideal americano del hombre que se hace a sí mismo. En el III Reich se enaltecía al obrero que seguía siéndolo y no al que había logrado dejar de serlo. 2.-En vez de fiestas salsicheras con litronas como se organizan hoy para el inculto populacho, el III Reich construyó barcos de lujo exclusivamente para obreros en los cuales todos los camarotes eran lujosos, pero iguales, incluidos los de la tripulación. 3.-Hace 10 años no había zonas peatonales en España. Hace 30 no las había en Europa, pero el III Reich, hace más de 60 años ya habían programado hacer carreteras de circunvalación y hacer posible pasear por los pueblos y aldeas. Hoy tenemos en todo el mundo zonas peatonales gracias al Dr. Robert Ley. 4.-Todavía hoy es posible escuchar ocasionalmente que a un mismo trabajo ha de corresponder un mismo sueldo, independientemente de que se trate de hombres o mujeres. Esto está hoy aceptado por todos, pero desde poco después de llegar al poder ya lo puso en práctica el nacionalsocialismo que tenía en gran consideración a las mujeres pues ellas trabajaban en las fábricas y luego en casa. Por ello las protegía y les tenía prohibidos los trabajos nocturnos y facilitaba las medias jornadas y las sustituciones por jóvenes del Servicio del Trabajo que permitían más vocaciones a las mujeres. 5.-Un objetivo fundamental de la política socialista del III Reich era reducir el tiempo de traslado desde la vivienda al puesto de trabajo, pues cuanto menor era el tiempo empleado más tiempo libre tenía el trabajador y su familia. Hoy parece que se pretenda exactamente lo contrario. Se trata de que los habitantes de Sabadell vayan a trabajar a Barcelona y los de Barcelona a Sabadell. El tiempo libre es en la actualidad un enemigo, hay que hacer masters, cursillos, pluriempleo, estudiar idiomas... para evitar el tiempo libre, que era lo fundamental en la política social del III Reich. 6.-Y para que el obrero pudiera ocupar ese tiempo libre se abrían los museos a las 7 de la tarde ya que antes del III Reich, como sigue ocurriendo ahora, los museos tienen los mismos horarios de trabajo. En el III Reich era diferente. 7.-Y como el socialismo del III Reich quería ante todo que el pueblo alemán se relacionase entre sí, una de las primeras medidas tomadas fue reducir el franqueo de correo y las tarifas telefónicas. 8.-Otro objetivo de la política socialista del III Reich era fomentar el regreso al campo que la revolución industrial había despoblado. ¡Y se consiguió! Y para ello se construyeron miles de colonias con pequeñas viviendas en armonía con el paisaje y con un pequeño jardín donde cultivar plantas y tener animales. ¡Y eso en plena época de crisis!. 9.-Pero como lo fundamental era que el hombre se hallase en contacto con la naturaleza se construyeron -y programaron- miles de caminos para paseantes, para coches y para bicicletas, discurriendo por lugares distintos aunque fuesen al mismo lugar. Esto todavía puede verse hoy en Alemania. También se lo deben al Dr. Ley. Pero como si llenamos el bosque de gente éste pierde su encanto, uno de los objetivos fundamentales era tener suficientes como para evitar la masificación. Etc., etc. Hay que tener en cuenta que toda esta política social tenía lugar en plena época de crisis y pobreza y pese a ello se programaba ya un futuro esplendoroso, jovial y luminoso. El que todo ese espíritu y esa propaganda sea olvidada y despreciada por los nacionalsocialistas actuales, es algo lamentable y que me entristece enormemente. Por ello creo que ya no puedo hacer más. Me doy por vencido. Me rindo. He sido derrotado. Mis enemigos metieron mi cuerpo entre rejas, mis "camaradas" han encerrado mi alma en un oscuro sótano, pestilente e insalubre. He agotado mis fuerzas. Me veo incapaz de convencer a nadie. El nacionalsocialismo es ahora cualquier cosa, pero desde mis 11 años hasta hoy sigo pensando que el nacionalsocialismo es el más grande y bello movimiento socialista de la historia, el único que ha sido capaz de crear una auténtica comunidad popular, unida por una misma forma de sentir y pensar. No me interesan las conspiraciones judeo-masónicas, ni las Órdenes mágicas, ni los índices craneales, ni el coleccionismo chapístico sobre la SS, ni la Tierra hueca, ni las cabezas idem, y estoy harto de los ataques y burlas a mi amada Cataluña (2) incluso por parte de buenos camaradas influidos por la ideología falangista, lo cual digo sin ánimo de crítica ya que el falangismo es una ideología nacionalista española pero el nacionalsocialismo no tiene porque serlo, y estos ataques a Cataluña me han molestado especialmente ya que yo nunca he dicho -ni diré nada negativo sobre ninguna región o nación de mi amada cultura. Estoy cansado, agotado de tanta puerilidad, vulgaridad y vanalidad. El nacionalsocialismo es, ha sido y debería ser un gran movimiento socialista obrero. Si en la actualidad nadie lo entiende no puedo hacer nada, los títulos de mis únicos dos libros políticos lo dejan muy claro: "Hacia un Socialismo europeo" y "Nuestro Socialismo". Hitler murió con 56 años. Yo me retiro a esa misma edad. Él hizo la gran revolución socialista y yo he hecho el ridículo. A cada cual según su capacidad.

lunes, 16 de julio de 2012

EL INTELECTUALISMO

EL INTELECTUALISMO (extraido de N.A. ) Una de las tantas enfermedades –y bastante grave- que aqueja al hombre actual es el intelectualismo. De este mal pueden decirse las mismas cosas que otros varios: que ataca a determinados tipos de seres vivos en determinadas condiciones, y que suele aparecer en edades determinadas; no se conoce la causa que lo produce, y los remedios aplicados se encuentran en vías de ensayo, con éxitos y fracasos alternados. Como siempre, la enfermedad parte de la descomposición de una de las partes del organismo. Cuando la mente empieza a trabajar sin orden ni sentido, cuando las ideas se vuelven obsesivas y acaparadoras, sin dar lugar a otra manifestación de vida, esa mente enrarecida padece de intelectualismo. Lo que hasta entonces había constituido el sano ejercicio de las facultades mentales –más o menos desarrolladas- pasa a convertirse en un deseo desenfrenado de acaparar más y más datos, de obtener más y más cifras, de hallar un por qué –el que sea- a lo inexplicable, de razonar lo irrazonable, de despreciar todo lo que no pase a través del tamiz del intelecto. Este hombre enfermo se deforma. Su cabeza crece desmesuradamente y merman a la par todas sus otras expresiones: se enfría el sentimiento, se apaga la fe, se debilita la voluntad, se entorpece el cuerpo. Todo aquello que no pueda ser racionalizado, no merece la pena de estar vivo. Si traemos a cuento esta curiosa y terrible enfermedad, es porque cada vez abundan más los afectados por ella, y porque desgraciadamente suele inculparse a la filosofía como una de sus causantes. En este sentido, la filosofía es concebida como un ejercicio intelectual, en que se combinan todos los conceptos, desde los concretos hasta los abstractos, y en el que la palabra tiene mucho más valor que el concepto mismo. La expresión favorita del atrapado por el intelectualismo es un lenguaje oscuro, complejísimo, sin significado en la mayoría de los casos, pero impactante, sonoro y categórico, al punto de impedir toda réplica o deseo de mayores explicaciones. Por todo ello, y ante el aumento alarmante de semejante epidemia, queremos destacar una vez más el valor auténtico de la filosofía como actividad integral, que trata de desarrollar un hombre auténtico en todas sus posibilidades de expresión. Pensar y hablar no son desechables, sino que, al contrario, deben ir unidos a una acción y un sentimiento acordes. Las facultades intelectuales son fructíferas en cuanto otorgan armas positivas para armonizar el ser humano; el cuerpo debe recibir sus adecuadas atenciones, los sentimientos deben ser cultivados con el mismo esmero que las ideas, la voluntad debe ponerse en juego para el logro real de las más nobles ambiciones. Nueva Acrópolis quiere un hombre equilibrado, en que no pese más la cabeza que los pies, ni tampoco se produzca el efecto contrario. La enfermedad señalada proviene, pues, de la ignorancia, por mucho que se utilice la mente. Y el antídoto más eficaz es la sabiduría, donde se unen todas las potencias humanas para lograr la cabal expresión de cada una de ellas. El hombre sano puede ser intelectual, pero no intelectualista. Delia Steinberg Guzmán

domingo, 15 de julio de 2012

La mujer, su marido y la familia

¿Por qué un libro que defiende la «sumisión» de las esposas se convierte en un bestseller en Italia? Su autora, Constanza Miriano, sostiene que el consejo de San Pablo «responde a los deseos más profundos de nuestro corazón». La controvertida frase de san Pablo a los Efesios, “Esposas, estad sujetas a vuestros maridos”, fue la inspiración de un best-seller italiano en el 2011:Sposati e sii sottomessa: Pratica estrema per donne senza paura (Vallecchi): Casada y sumisa: práctica extrema para mujeres sin miedo. Costanza Miriano, su autora, está convencida de que muchos conflictos matrimoniales podrían resolverse si la mujer entiende su verdadero talento como esposa y madre: la sumisión del servicio. Los ejemplares de su libro pasan de mano en mano entre muchas italianas. - ¿Qué inspiró su libro? - Fue una casualidad. Pasaba muchas horas en el teléfono, intentando convencer a una amiga de que se casara. Cuando le conté la historia de mi amiga a un colega, le expliqué que las expectativas de mi amiga sobre el matrimonio eran irreales; en muchos aspectos, era el novio quien tenía la razón. Veía que ellos podían ser felices juntos, pero no se decidían a comenzar esa felicidad por culpa de las ideas erradas que hoy tenemos sobre el amor y el matrimonio. Le dije también que la mujer tiene que ser capaz de mediar, de unir, en vez de dividir. A él le llamaron la atención mis ideas y me puso en contacto con la editorial. - ¿Por qué cuesta hoy ese rol de unir? - La mujer ha luchado tanto por la emancipación que, de paso, ha perdido un poco su identidad profunda, ese ‘genio femenino’. - Hablar de ser ‘sumisas’ es muy osado. ¿Por qué eligió esta palabra? - Yo no la elegí. Lo tomé de la carta de san Pablo a los Efesios. Parece una palabra ofensiva para nosotras, las mujeres de hoy, que no queremos renunciar a la lógica del poder. Sin embargo, la sumisión indica otra lógica: la del servicio recíproco, que es el servicio al que está llamada la mujer. - Entonces, ¿el hombre domina? El hombre está llamado a servir de una manera diferente: debe estar “listo a morir por su esposa, como Cristo murió por la Iglesia”. Su papel no es más fácil que el nuestro. - ¿Qué inspiró su libro? - Fue una casualidad. Pasaba muchas horas en el teléfono, intentando convencer a una amiga de que se casara. Cuando le conté la historia de mi amiga a un colega, le expliqué que las expectativas de mi amiga sobre el matrimonio eran irreales; en muchos aspectos, era el novio quien tenía la razón. Veía que ellos podían ser felices juntos, pero no se decidían a comenzar esa felicidad por culpa de las ideas erradas que hoy tenemos sobre el amor y el matrimonio. Le dije también que la mujer tiene que ser capaz de mediar, de unir, en vez de dividir. A él le llamaron la atención mis ideas y me puso en contacto con la editorial. - ¿Por qué cuesta hoy ese rol de unir? - La mujer ha luchado tanto por la emancipación que, de paso, ha perdido un poco su identidad profunda, ese ‘genio femenino’, como lo llamaba Wojtyla en la encíclicaMulieris dignitatem. - Hablar de ser ‘sumisas’ es muy osado. ¿Por qué eligió esta palabra? - Yo no la elegí. Lo tomé de la carta de san Pablo a los Efesios. Parece una palabra ofensiva para nosotras, las mujeres de hoy, que no queremos renunciar a la lógica del poder. Sin embargo, la sumisión indica otra lógica: la del servicio recíproco, que es el servicio al que está llamada la mujer. - Entonces, ¿el hombre domina? El hombre está llamado a servir de una manera diferente: debe estar “listo a morir por su esposa, como Cristo murió por la Iglesia”. Su papel no es más fácil que el nuestro. - ¿Qué significa ser sumisas? - San Pablo nos recuerda que a las mujeres nos gusta controlarlo todo, decir la última palabra, manipular por detrás. Ser sumisas significa, literalmente, estar por debajo para ser el apoyo de todos los miembros de la familia, para acompañar a los más débiles. Es una cualidad propiamente femenina, a pesar de lo que diga la revolución feminista. - ¿Puede ser feliz una mujer sumisa? - Es nuestro verdadero talento. Podemos trabajar y tener mucho más éxito, pero lo que mejor sabemos hacer, y lo que responde a los deseos más profundos de nuestro corazón, es esa capacidad de servir y unir a las personas. El amor de la mujer es más altruista y lleva al hombre a “salir” de sí, mientras que la mujer recibe (la relación física es una representación de lo espiritual). Los hombres y las mujeres necesitan recuperar esos talentos específicos pues se complementan entre sí. - ¿Cómo es una buena esposa? - Una buena esposa sabe acoger con dulzura y paciencia. Mira a su marido desde un punto de vista positivo y acepta como bueno lo que viene de él. Pospone la confrontación: controla sus emociones y espera. Y nunca, jamás, contradice al padre delante de los hijos. - ¿Se puede aprender a ser así? - Tenemos un modelo: la Señora de la Medalla Milagrosa, con las manos y los brazos abiertos para recibir lo que le llega. Y debajo de sus pies, la serpiente –que es nuestra lengua– siempre dispuesta a criticar, a ver lo malo, a hacer hincapié en lo que falta. - ¿Qué le aconsejaría a una joven para tener un matrimonio más pleno? - Muchas jóvenes están decepcionadas porque hoy tenemos muchas exigencias del matrimonio. Anteriormente, el matrimonio era un medio para encontrar una casa; ahora queremos ser felices. Esto es razonable, pero debemos aceptar nuestras limitaciones y las del otro. El amor no es un sentimiento, es una decisión. Nos adherimos libremente, con toda nuestra voluntad, a elegir a una persona de por vida. Habrá momentos aburridos, pero tenemos que entrenar los ojos para descubrir la belleza inimaginable de la vida cotidiana. Quien salta de una historia a otra y no tiene el coraje de subir las cuestas, no puede ni soñar lo que es posible. - ¿Cuál es el principal reto que presenta el matrimonio en la actualidad? - Dios ha desaparecido del horizonte y sin Dios, es imposible pensar en algo que sea para siempre. Anteriormente primaban las tradiciones y la gente se mantenía firme. Hoy, la idea de ser infiel, de seguir nuestros instintos, es el aire que respiramos. Hay como unaconspiración en contra de la familia y solo la Iglesia da la batalla cultural por nosotros. - ¿Qué cambio está provocando su libro entre las mujeres italianas? - He recibido cartas de mujeres que dicen que les ayudó a cambiar su vida matrimonial. Muchas me agradecen porque han aprendido a querer mejor a sus maridos; algunas han decidido casarse; otras, han superado una crisis; y muchas católicas dicen que ciertas cosas no se escuchan ya en círculos religiosos, mientras que mi visión, la de San Pablo, es la que responde a los deseos profundos de sus corazones. ¿Está preparando otro libro? Sí, estoy analizando la siguiente frase de san Pablo a los Efesios: “Maridos, estad dispuesto a morir por vuestras esposas...”. Si la mujer tiende a controlarlo todo, el hombre tiende al egoísmo. Por eso su llamada es la del heroísmo. El próximo libro es para ellos. Dos hermosas lecturas del Evangelio una de San Pablo y otra de San Pedro, ilustran mejor que nada esta postura no en favor del falso machismo o dominación de la mujer al hombre, sino en el rol que cada uno debe tener dentro de la vida conyugal, los hombres y las mujeres deben escoger en sus vidas entre dos caminos, la entrega total y absoluta a Dios como siervos y siervas de Dios, en el Orden Sagrado, o bien , en el sacramento del matrimonio, como un bien no solo para el hombre y la mujer, sino para el conjunto de la sociedad y de toda la Santa Madre Iglesia. Los seglares que se niegan a casarse por diversos motivos, diversion, falta de tener compromisos, excesivo amor a la libertad, una falsa piedad que los hace hacer votos de castidad sin comprometerse a servir a la Iglesia en tantas ordenes religiosas que hoy necesitan mas que nunca de vocaciones, es mas cómodo quedarse en casa, en estos casos de falsa beatitud, también están los que se juntan y no tienen hijos viviendo en adulterio, los que viven en concubinato y tienen hijos pero no se casan por temor al compromiso, las mujeres que disiden ser madres solteras pero no tener el compromiso de tener un marido y la falta de caridad que estas tienen para con sus hijos por negarles el derecho a tener un padre, entre tantas otras formas de evitar el matrimonio, poniendo las mil y una excusas. (J. Luis Ventrice) ( 2-2 ) LECTURA DE LA CARTA DEL APOSTOL SAN PABLO A LOS EFESIOS 5,2a.21-33 Hermanos: Vivan en el amor, igual que Cristo nos ha amado y se ha entregado por nosotros. Sean sumisos unos a otros con respeto cristiano. Las mujeres, que se sometan a sus maridos como al Señor; porque el marido es cabeza de la mujer, así como Cristo es cabeza de la Iglesia; Él, que es el Salvador del cuerpo. Pues como la Iglesia se somete a Cristo, así también las mujeres a sus maridos en todo. Maridos, amen a sus mujeres como Cristo amó a su Iglesia. Él se entregó a sí mismo por ella, para consagrarla, purificándola con el baño del agua y la palabra, y para colocarla ante sí gloriosa, la Iglesia, sin mancha ni arruga ni nada semejante, sino santa e inmaculada. Así deben también los maridos amar a sus mujeres, como cuerpos suyos que son. Amar a su mujer es amarse a sí mismo. Pues nadie jamás ha odiado su propia carne, sino que le da alimento y calor, como Cristo hace con la Iglesia, porque somos miembros de su cuerpo. "Por eso abandonará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán los dos una sola carne". Es éste un gran misterio; y yo lo refiero a Cristo y a la Iglesia. Sobrellévense mutuamente y perdónense, cuando alguno tenga quejas contra otro. En una palabra, que cada uno se ustedes ame a su mujer como a sí mismo. Y que la mujer respete al marido. PALABRA DE DIOS ( 2-4 ) LECTURA DE LA PRIMERA CARTA DEL APOSTOL SAN PEDRO 3,1-9 Mujeres, sean sumisas a sus maridos para que, si incluso algunos no creen en la Palabra, sean ganados no por palabras, sino por la conducta de sus mujeres, al considerar su conducta casta y respetuosa. Que su adorno no esté en el exterior: en peinados, joyas y modas, sino en lo oculto del corazón, en la incorruptibilidad de un alma dulce y serena; esto es precioso ante Dios. Así se adornaban en otro tiempo las santas mujeres que esperaban en Dios, siendo sumisas a sus maridos; así obedeció Sara a Abraham, llamándole señor. De ella se hacen hijas cuando obran bien, sin tener ningún temor. De igual manera, ustedes, maridos, en la vida común, sean comprensivos con la mujer que es un ser más frágil, respetándolas, ya que son también coherederas de la gracia de la Vida, para que sus oraciones no encuentren obstáculo. Procuren todos tener un mismo pensar y un mismo sentir: con afecto fraternal, con ternura, con humildad. No vuelvan mal por mal o insulto por insulto; al contrario, respondan con una bendición, porque su vocación mira a esto: a heredar una bendición. PALABRA DE DIOS

viernes, 13 de julio de 2012

PASCAL

Sólo hay tres clases de personas: los que sirven a Dios, habiéndolo encontrado; los que se afanan buscándolo, porque no lo han encontrado; los que viven sin buscarlo ni haberlo encontrado. Los primeros son razonables y felices, los últimos son locos y desdichados, los del medio son desdichados y razonables.

lunes, 9 de julio de 2012

UNA SOLA CLASE SOCIAL

Un sola clase social. La de todos los españoles. Por Carlos Rodriguez El Nacional Sindicalismo En la teoría económico-laboral del Nacional Sindicalismo se considera humillante que las personas tengan que acudir al mercado para vender su fuerza de trabajo. Por eso pretendemos que el contrato de trabajo sea sustituido por el contrato de sociedad donde lo personal, lo humano y lo espiritual se concilien con la laboriosidad, pues el trabajador cuando se emplea en algo suyo es cuando se siente plenamente responsable y salva su dignidad. De esta forma, el trabajador dejaría de ser un servidor de la economía (liberalismo) y de la producción (Marxismo) para ser principio y fin de su actividad. La teoría de la asociación se presta mejor a una justa distribución y evita la lucha de clases. El Estado Nacional Sindicalista debe sustituir, aunque sea de forma violenta, los formulismos individualistas del capitalismo por un ordenamiento totalitario laboral que haga primar los intereses sociales y colectivos. Nuestros deseos se encaminan a formar un Estado totalitario sindical-laboral donde se promulguen legislaciones de doctrina social para que los fundamentos jurídicos del Estado sean transformados en derechos de la persona. En el Nacional Sindicalismo hablar de Justicia es hablar de la Dignidad de la Persona, cooperando en el Estado, como bien común, al servicio del engrandecimiento de la Nación, alegres y orgullosos de la Patria. Consideramos que todo lo hasta aquí dicho lo suscribe cualquier persona que no esté contaminada por el egoísmo liberal o por la tontuna de la democracia. La persona no debe ser un objeto manipulado y manipulable por ninguna ideología, por el contrario, la ideología que no sea una herramienta al servicio de la persona y que se imponga por medio de sufragios mayoritarios se llama tiranía consentida e institucionalizada por la democracia. Al fin y al cabo lo que hacen las democracias es eso, institucionalizar los egoísmos y las estupideces. El Nacional Sindicalismo funde en una amalgama totalitaria los valores tradicionales de la doctrina social de la Iglesia, los espirituales de la Patria y la idea revolucionaria, también social, de implantar la ordenación ético-jurídica del trabajo en el ordenamiento totalitario sindical del estado con su completa subordinación a la persona. El trabajo no es un concepto material de “mercancía del trabajo”, el trabajo no puede ser sometido a negociación, por tanto, no puede ser objeto de contratación, por lo cual deben desaparecer los contratos debiendo primar el aspecto humano del trabajador, de su existencia, de su familia y de su dignidad a la hora de ser integrados en las empresas, como productores y como legítimos dueños de su esfuerzo, recompensados como legítimos perceptores de los beneficios de la producción en la medidas de su participación en la labor social y económica de la empresa. Todo esto es la economía productiva privada pero también sindical de la empresa del Estado Nacional Sindicalista, donde se considera privada la propiedad sindical, aunque sea, como su nombre indica, compartida, y el estado únicamente será un mero garante de la propiedad, sin inmiscuirse en las decisiones de la empresa, porque el Estado Nacional Sindicalista solo garantiza los derechos, pero ni impone ni oprime. Asimismo, el nuevo Estado garantizará a la Nación los servicios necesarios para vivir una existencia digna, mantenido con las plusvalías producidas por la banca nacional y pública y con ligeros impuestos sobre las plusvalías empresariales y nunca sobre las rentas del trabajo. La renta del trabajo debe ser superior a la renta del capital. Los servicios públicos de necesidad social serán gestionados por personas altamente cualificadas y capacitadas nacionalmente, compensadas con salarios igualmente dignos que garanticen una vida tan aplicada como cómoda. El trabajo es un derecho, y el estado debe garantizarlo, dando facilidades técnicas, logísticas y económicas y prestaciones a los españoles que se queden desempleados hasta su integración en otra empresa. La nacionalización del crédito, en el estado el Nacional Sindicalista, consiste en facilitar a los españoles cualquier iniciativa que no se enfrente a los intereses nacionales y sociales y para acceder a ello no debe ser necesario como garantía más que el honor del trabajo, nada de hipotecas, avales o intereses usureros. Nos enfrentamos al marxismo que pone las plusvalías del trabajo en manos del partido y nunca del Estado como garantía de justicia, porque en el marxismo, por mucho que lo proclamen, el estado no existe, el partido es el único beneficiario. Sustituyen las oligarquías liberales por las oligarquías de partido. El Estado Totalitario Nacional Sindicalista disciplina a las economías liberales y libera a las personas disciplinadas por ellas mismas, mediante el honor y el Patriotismo. El Estado Totalitario Nacional Sindicalista socializa los bienes de necesidad pública y libera al pueblo (Nación) de la tiranía socialista. De ahí la frase pronunciada por Manuel Hedilla que da título a nuestro escrito. ¡UNA SOLA CLASE SOCIAL ¡LA DE TODOS LOS ESPAÑOLES! UN SOLO TÍTULO ¡EL DEL TRABAJO!. ¡VIVA LA REVOLUCION NACIONAL SINDICALISTA! ¡ARRIBA ESPAÑA!. Carlos Rodríguez. Jefe Nacional del TNS